Muchos emprendedores entran de lleno en el mundo empresarial creando una entidad mercantil, lo que no suelen tener en cuenta es que el tema de la contratación de familiares puede ser espinoso. De ahí que surjan dudas sobre si es posible contratar a un hijo en una Sociedad Limitada.
En este artículo aprenderás:
- ¿Puedo contratar a un hijo en una Sociedad Limitada?
- ¿Hay bonificaciones por contratar a un hijo?
- Ventajas e inconvenientes de contratar a un hijo en una SL
- Ventajas e inconvenientes de tener a un hijo como autónomo colaborador en una SL
¿Puedo contratar a un hijo en una Sociedad Limitada?
Existen dos maneras de crear una relación laboral con un hijo a través de una Sociedad Limitada:
1. Formalización de un contrato de trabajo
La opción más común suele ser contratar al hijo como empleado, formalizando el correspondiente contrato de trabajo y cursando el alta en la Seguridad Social.
Esto es obligatorio en los casos que no hay convivencia entre el hijo y el progenitor contratante, cuando el hijo es menor de 30 años, o cuando supera esa edad pero tiene dificultades para encontrar un empleo (especialmente si tiene una discapacidad intelectual o física superior al 33%).
Cuando se formaliza el contrato, el empleado cotiza por todas las contingencias, incluyendo el desempleo (esto último solo si no convive con el progenitor). Además, el hijo contratado de esta manera tiene los mismos derechos y obligaciones que cualquier otro empleado de la empresa.
2. Alta como autónomo colaborador
Si no se dan los requisitos para poder formalizar un contrato con el hijo, entonces la única forma de que este preste servicios a la SL es como autónomo colaborador dándose de alta en el RETA.
Aunque en este caso no va a cotizar por desempleo ni por formación profesional, sí tiene derecho una bonificación en su cuota de autónomo durante los primeros 24 meses de actividad.
¿Hay bonificaciones por contratar a un hijo?
Si el hijo se encuentra en situación de desempleo (inscrito como demandante de empleo en el SEPE) en el momento de celebrar con él un contrato indefinido, la Sociedad empleadora recibe una bonificación del 100% de la cuota por contingencias comunes por un período de 12 meses.
En el caso de que el hijo se convierta en autónomo colaborador, la bonificación se materializa en un descuento del 50% de la cuota de autónomo durante los primeros 18 meses de actividad y del 25% en los seis meses siguientes.
Ventajas e inconvenientes de contratar a un hijo en una SL
Para saber si en tu caso te conviene más hacer un contrato o que tu hijo pase a ser autónomo colaborador, es importante examinar las ventajas e inconvenientes de ambas figuras.
Ventajas de la contratación por cuenta ajena
- El hijo contratado tiene una cobertura social completa, incluida una posible prestación por desempleo en el futuro. Porque cotiza por todas las contingencias.
- Disfruta de los mismos derechos laborales que cualquier otro empleado: vacaciones, pagas extraordinarias, permisos retribuidos, etc.
Inconvenientes
- La contratación implica asumir una serie de costes laborales asociados como salarios, cotizaciones sociales, etc.
- Tener un empleado requiere cumplir con una serie de obligaciones como formalizar el contrato de trabajo, llevar un registro horario de la jornada, pagar cotizaciones a la Seguridad Social, o aplicar la normativa de prevención de riesgos laborales, entre otros.
Ventajas e inconvenientes de tener a un hijo como autónomo colaborador en una SL
Si no se opta por la contratación, se puede escoger la modalidad de autónomo colaborador, la cual también tiene pros y contras.
Ventajas
- Esta relación laboral es mucho más flexible en cuanto a cuestiones como las condiciones de trabajo o el horario, porque el autónomo no es un trabajador y, por tanto, tiene mayor independencia.
- Existe una bonificación en la cuota que se paga al RETA y se puede disfrutar de ella durante 24 meses.
Inconvenientes
- Como trabajador por cuenta propia, tu hijo va a tener menor protección social.
- Asume plenamente sus obligaciones fiscales. Tiene que presentar sus autoliquidaciones de impuestos trimestralmente y realizar los pagos que correspondan.
Ya sea como trabajadores por cuenta ajena o por cuenta propia, la integración de los hijos en la empresa es una buena manera de que adquieran experiencia laboral y se formen en un entorno empresarial. Además, esta es una buena solución si lo que se busca es que las generaciones futuras continúen al frente del negocio.
Queda claro entonces que se puede contratar a un hijo en una Sociedad Limitada, pero hay que ver en cada caso concreto si compensa celebrar un contrato o si es mejor que se dé de alta como autónomo colaborador.