A la hora de hacer una factura, es obligatorio incluir el IVA. El Impuesto de Valor Añadido se debe pagar cada vez que se contrata un servicio o se adquiere un producto, pero tiene una peculiaridad, y es que su cuantía no es fija.
Existen distintos tipos de IVA, y saber cómo aplicar diferentes tipos de IVA en una factura resulta esencial para no tener problemas con Hacienda, ni tampoco con los clientes. Afortunadamente, es más sencillo de lo que parece, y vas a darte cuenta de ello cuando sigas leyendo y veas qué tipos de IVA hay, sus peculiaridades y cómo se aplican en las facturas.
En este artículo aprenderás:
- ¿Qué tipos de IVA existen en España?
- El IVA de productos y servicios accesorios
- ¿Cómo facturar con distintos tipos de IVA?
- Ejemplo de factura con diferentes tipos de IVA
- Ejemplo de factura con diferentes tipos de IVA (productos accesorios)
¿Qué tipos de IVA existen en España?
Antes de ver cómo elaborar facturas con diferentes tipos de IVA hay que saber, precisamente, cuáles son los tipos de IVA que existen en España:
- IVA general (21%): es el tipo de IVA más común, y el que encontramos en bienes y servicios como carburantes, ropa, telefonía, bricolaje, etcétera. Se aplica en todo aquello que no se considera IVA reducido o superreducido.
- IVA reducido (10%): menos extendido que el general, se aplica en restauración, hostelería, transporte, productos de higiene femenina, actividades culturales y más.
- IVA superreducido (4%): el más bajo de todos, se aplica principalmente en bienes y/o servicios considerados de primera necesidad, alimentación esencial, medicamentos esenciales, vehículos para minusválidos, ayuda a domicilio…
Si quieres saber más sobre cada uno, te recomendamos echar un vistazo a fondo a nuestra publicación sobre los tipos de IVA, con tablas completas y más detalles.
El IVA de productos y servicios accesorios
Otro aspecto a tener en cuenta también es qué son los productos y servicios accesorios. Estos son todos aquellos que no suponen un fin como tal para el cliente, sino un medio para poder disfrutar del producto o servicio en mejores condiciones.
¿Qué ocurre en estos casos al facturar? Cuando se incluyen en una factura, no figuran con su propio IVA. Se aplica el mismo tipo de IVA a todo, que es el del producto o servicio principal.
¿Cómo facturar con distintos tipos de IVA?
Ahora vamos a ver lo más importante, cómo hacer facturas con diferentes tipos de IVA. La mejor forma de verlo es con un ejemplo, así que vamos a ver un par para que puedas entender el proceso:
Ejemplo de factura con diferentes tipos de IVA
Imagina que tienes una farmacia. Un cliente viene a comprar varios productos que pertenecen a diferentes categorías y, por lo tanto, tienen distintos tipos de IVA a aplicar. Su compra es sencilla: un paquete de gasas y, de paso, una crema antiarrugas.
El paquete de gasas tiene un precio de 3 € sin IVA, y la crema antiarrugas cuesta 10 € sin IVA. La crema, al ser un producto de cosmética, tiene un IVA general (21%). Las gasas, al ser productos farmacéuticos de uso directo, tienen un IVA reducido (10%). Debemos hacer los cálculos por separado para luego sumar los totales:
- IVA del paquete de gasas: 10% de 3 € = 0,30 €
- IVA de la crema antiarrugas: 21% de 10 € = 2,10 €
- IVA total (IVA paquete de gasas + IVA crema antiarrugas): 0,30 € + 2,10 € = 2,40 €
La factura final quedaría así:
Producto 1: Paquete de gasas | 3€ |
Producto 2: Crema antiarrugas | 10€ |
Total Base Imponible | 13€ |
Total IVA | 2,40€ |
Total a pagar | 15,40€ |
Ejemplo de factura con diferentes tipos de IVA (productos accesorios)
El proceso a la hora de elaborar una factura con diferentes tipos de IVA habiendo productos accesorios es más sencillo todavía. La clave aquí radica en determinar qué es el producto o servicio central, que determinará el IVA, y qué es lo accesorio.
Un bar puede ser el ejemplo perfecto. Su servicio principal es el de comida, dentro de la restauración y, por lo tanto, con un 10% de IVA. Sin embargo, sirve bebidas alcohólicas, que tienen un IVA del 21%.
En un día normal, un cliente pide comer de menú, con dos platos y postre, sin incluir la bebida. El menú tiene un precio de 10 € sin IVA, y el comensal pide una cerveza para beber, cuyo precio es de 1,5 € sin IVA. La cerveza es un complemento que mejora el disfrute del servicio, por lo tanto, el Impuesto de Valor Añadido que se le aplicaría es del 10%, al igual que en el resto de comida.
- IVA del menú: 10% de 10 € = 1 €
- IVA de la cerveza: 10% de 1,5 € = 0,15 €
- IVA total (IVA menú + IVA cerveza): 1 € + 0,15 € = 1,15 €
La factura final sería así:
Menú | 10€ |
Bebida | 1,5€ |
Total Base Imponible | 11,5€ |
Total IVA | 1,15€ |
Total a pagar | 12,65€ |
Como has podido comprobar, elaborar facturas con distintos tipos de IVA es muy simple. La clave reside en tener claro a qué categoría pertenece cada producto y/o servicio y, sobre todo, cuál es la actividad o producto principal que se brinda. Por suerte, si cuentas con un buen programa de facturación, todo se vuelve incluso más sencillo.