Una de las primeras dudas que tienen los autónomos y pymes al arrancar su negocio es cuánto deberán gastar al contratar una gestoría para llevar sus impuestos, contabilidad y demás obligaciones.
A día de hoy existen cientos de asesorías en el mercado que ofrecen todo tipo de servicios a precios muy distintos. Sin embargo, no todas garantizan a los autónomos llevar de manera correcta y al día sus obligaciones fiscales y contables.
Como sucede con cualquier otra empresa, el coste de la gestoría dependerá de los servicios que se ofrecen pero también de otros aspectos como el modelo de negocio, si es online o presencial, y sobre todo de la calidad del asesoramiento.
En este artículo aprenderás:
- ¿Qué tipos de gestoría existen para autónomos?
- ¿Por qué existe tanta diferencia de precio?
- ¿Qué servicios debería de ofrecer una buena gestoría?
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Tipos de gestoría para autónomos
Una de las decisiones más importante que debe tomar cualquier emprendedor a la hora de iniciar su negocio es la gestoría que se encargará de llevar al día sus impuestos, su contabilidad y demás obligaciones con Seguridad Social o Hacienda.
En los últimos años, se han multiplicado las opciones y hay cada vez más gestorías que ofrecen distintos servicios a los autónomos, a veces a costes muy bajos. A día de hoy, es posible encontrar asesorías a casi cualquier precio: desde los 25 o 30 euros mensuales, hasta más de 200 euros al mes.
Lógicamente, el precio de la asesoría dependerá del tipo de servicios que ofrece el profesional al autónomo. Algo muy importante, dado que los asesores no deberían limitarse a presentar impuestos, sino que también deben conocer a cada cliente para prestarle un correcto asesoramiento y cumplir todas sus obligaciones de forma correcta.
De lo contrario, el negocio podría acabar perdiendo dinero al no beneficiarse de los distintos incentivos disponibles o, todavía peor, al recibir un requerimiento o sanción de Hacienda por haber presentado mal los impuestos.
Por ello, antes de ver cuánto cuesta una gestoría, lo recomendable es entender qué tipos de asesoría existen y por qué tienen fijados unos u otros precios.
Asesoría low cost
En los últimos años se han popularizado distintos modelos de asesoría que ofrecen “paquetes” para llevar los impuestos y cuentas de los autónomos por poco más de 20 o 30 euros.
Este rango de precio, que es el más bajo por el que se puede encontrar una asesoría, suele incluir un “paquete básico” que apenas incluye el alta en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) y en Hacienda y la presentación de los principales impuestos, que suelen ser IVA e IRPF.
El problema de este tipo de asesorías es que, al no tener un profesional asignado para cada autónomo, que conozca su negocio, sus gastos o su situación personal, se pueden perder cientos o incluso miles de euros al año en deducciones de impuestos como IVA o IRPF.
De hecho, muchos de los clientes que llegan a los servicios de asesoría premium de Quipu han recibido en alguna ocasión requerimientos o sanciones por estar mal asesorados y presentar incorrectamente algunos impuestos como IVA o IRPF.
Asesoría premium
Precisamente, el segundo tipo de gestoría, las asesorías premium, suele tener tarifas más elevadas, aunque, a la larga, se amortiza este dinero por las garantías que se ofrecen, al evitar problemas con Hacienda y optimizar las declaraciones de impuestos.
Las asesorías premium son un modelo de negocio cuya propuesta se centra en la calidad y personalización del servicio, en vez de en el precio.
Por un coste mensual algo más elevado que el de las gestorías low cost, los autónomos y pymes tienen asignado a un asesor profesional que conoce todos sus datos fiscales y los de su negocio, y le ayuda a sacar el máximo rendimiento a sus declaraciones de impuestos.
Habitualmente estas gestorías suelen tener precios a partir de los 80 o 90 euros al mes para los autónomos -algo más para las empresas-. Aunque el coste puede parecer más elevado, a la larga la diferencia se amortiza casi siempre tan sólo al optimizar las declaraciones de impuestos e incluir todos los gastos deducibles, o solicitar las distintas subvenciones disponibles para cada autónomo.
Un ejemplo de este modelo es el que ofrecemos en Quipu, un servicio de asesoría premium que se encarga de asignar a cada empresario un gestor certificado y validado que llevará su caso desde el primer momento y le asesorará sobre las mejores opciones para reducir su factura fiscal, para optar a distintas ayudas, y para cumplir con la legislación vigente en cada momento.
Aparte de la calidad del servicio, tampoco hay que olvidar que hay otros factores que pueden influir en el precio de una asesoría. Uno de ellos es si la gestoría está basada en un modelo online o tradicional.
La asesoría online es un modelo de negocio que presta servicios de asesoramiento fiscal, contable o laboral a los autónomos y empresas a través de medios tecnológicos. Por su lado, la asesoría tradicional es el modelo más conocido por todos los autónomos y pymes, donde un asesor atiende personalmente en una oficina a los clientes para resolver sus dudas y ayudarles a cumplir con sus obligaciones fiscales y contables.
A diferencia de la asesoría online, la tradicional suele enfocarse al completo en la atención presencial a los negocios, por lo que los clientes se ven obligados a desplazarse hasta el despacho para resolver muchas dudas o trámites, y además se ven limitados por los horarios de atención comercial.
Esta necesidad de mantener unas oficinas abiertas al público y tener que contratar personal para atender presencialmente a cada cliente dispara los costes de este tipo de asesorías tradicionales, por lo que habitualmente suelen tener un precio mayor que las asesorías online.
🔗 Ampliar información: Si quieres saber más sobre las diferencias entre una asesoría low cost y premium te recomendamos que leas nuestro artículo específico.
¿Por qué existe tanta diferencia de precio?
A día de hoy, hay gestorías para autónomos por casi cualquier rango de precio. Lo habitual es que el coste de estos servicios oscile entre los 30 euros y los 200 euros, dependiendo de si el cliente es autónomo o empresa, si la asesoría es online y tradicional y sobre todo, si sus servicios son low cost o premium.
Normalmente, las diferencias de precios que hay entre unas y otras gestorías se deben a la calidad y variedad de servicios que ofrecen a los autónomos y pymes.
Lógicamente, no tiene el mismo precio un servicio básico y despersonalizado de elaboración de impuestos como IVA o IRPF y de alta como autónomo -que cuesta apenas unos minutos-, que un servicio integral y personalizado de presentación de impuestos, asesoramiento sobre novedades legislativas y subvenciones o atención constante para orientar sobre todas las dudas que tenga el cliente.
De hecho, la principal razón por la que algunas asesorías cuestan más que otras está en la seguridad y en las garantías. Mientras el modelo low cost ofrece gestiones básicas a cambio de un precio reducido, el segundo permite a los negocios acceder a un servicio de asesoramiento completo y personalizado.
Esto, muchas veces significa que por pagar una tarifa algo más elevada el autónomo acabará pagando menos impuestos a largo plazo con una gestoría premium y, además, podrá tener la tranquilidad de llevar todas sus obligaciones al día y no tener problemas con Seguridad Social y Hacienda.
¿Qué servicios debería de ofrecer una buena gestoría?
A la hora de elegir la asesoría que llevará sus impuestos y contabilidad, los autónomos no sólo deberían tener en cuenta el precio, sino también los servicios disponibles y la calidad del asesoramiento.
A continuación resumimos algunos aspectos que debería tener la gestoría que elija el autónomo para asegurar un buen servicio de asesoramiento al autónomo o pyme.
Elaboración y presentación de impuestos por parte de un profesional experimentado
El elemento más importante a la hora de escoger una asesoría es, lógicamente, la elaboración de los impuestos. Sin embargo, con esto no basta. La asesoría debe disponer de profesionales experimentados que cumplan correctamente las obligaciones fiscales del autónomo y, además, que también se encarguen de presentar los impuestos para que, en caso de error, la responsabilidad no recaiga sobre el cliente.
Atención personalizada con el mismo gestor
Una de las claves más importantes de una buena asesoría es que el servicio sea lo más personalizado posible. El asesor debe conocer al detalle la situación del negocio para poder ayudarle a sacar el máximo partido a las deducciones de impuestos o a las subvenciones. Además, la personalización evita posibles requerimientos o sanciones fruto de errores que parten casi siempre del desconocimiento del negocio por parte del asesor.
En el caso de Quipu, se selecciona un asesor para cada negocio, de acuerdo con sus necesidades y preferencias, por lo que el cliente hablará siempre con la misma persona.
Asesoramiento sobre ayudas y novedades
Una de las claves más importantes que definen una buena gestoría es que ofrezca también servicios de orientación y asesoramiento para que el cliente esté al día de todas las novedades que afectan a su negocio y de las nuevas convocatorias de subvenciones a las que puede acceder.
Sesiones de onboarding
El onboarding es uno de los servicios extra que debería incluir una buena asesoría. Con este proceso, los nuevos clientes pueden familiarizarse con su asesor y con todos los demás servicios.
Esto garantiza la eficiencia entre el cliente y el asesor a la hora de trabajar sincronizados a través de la plataforma y además, permite evitar errores en las declaraciones y malos entendidos.
Variedad de canales para contactar con el asesor
Otro de los aspectos clave que debe tener una buena asesoría es la mayor variedad posible de canales para que el cliente resuelva todas sus dudas o consultas de forma ilimitada con el asesor.
Una buena asesoría debería poner siempre a disposición del cliente todos los canales de comunicación posibles: email, whatsapp, teléfono y el chat interno de la plataforma.
Integración de distintas herramientas
A día de hoy una buena asesoría debería tener integradas las herramientas más avanzadas para simplificar las finanzas, contabilidad e impuestos de los autónomos.
En el caso de Quipu, al tener también integrado en sus servicios de asesoría una plataforma de facturación, el autónomo podrá subir todas sus facturas de ingresos y gastos y habrá un asesor certificado que validará constantemente su facturación.
Además, su servicio de asesoría también ofrece otras herramientas digitales como la conciliación bancaria para que los movimientos de las cuentas y las facturas (emitidas y recibidas) coincidan.
Generación de cuentas anuales
Por supuesto, en el caso de ser una pyme, es importante que la gestoría que se elija cuente también con un servicio de elaboración de las cuentas anuales. Lo recomendable sería que el mismo asesor que se ha encargado de llevar la contabilidad y los aspectos fiscales del negocio, y que está familiarizado con él, sea quien realice todas las obligaciones contables anuales de la pyme.
